lunes, 19 de septiembre de 2011

LA OBRA MISIONERA "Una vida apasionante y gratificante en Dios" (Rev. Martin Montiel - Costa Rica)

Por: Rev. Martín Montiel - Costa Rica

Guillermo Carey, el gran misionero en la India,considerado el Padre de las Misiones Modernas, dijo una vez a un grupo de personas: "Yo bajo si ustedes sostienen las sogas", "Yo voy a las cuevas, yo voy a los lugares donde ustedes nunca irán, pero ustedes tienen que sostener las cuerdas y sostenerlas con firmeza y con fuerza”.

La biografía de este gran misionero es inspiradora, se ha dicho que este hombre de Dios hizo más cosas por el pueblo de la India que ningún político británico, tradujo las Sagradas Escrituras en al menos 44 idiomas y varios dialectos, fue un hombre humilde pero incansable trabajador cuando se trataba de traducir las escrituras y hablarle la Palabra de Dios a las personas.

Guillermo Carey tenía una pasión inigualable  por la obra misionera y aunque no contaba con la ayuda d muchos de sus semejantes, perseveraba para que la Palabra de Dios fuera difundida a todos los rincones de la India.

“Yo bajo si ustedes sostienen las sogas” frase que tiene gran fuerza, que encierra un llamado al compromiso misionero, no solo para el que tiene el fuego del llamado misionero sino para aquellos que sostienen estos ministerios en muchos aspectos, vivimos en tiempos de egoísmo, en donde todos quieren sobresalir, en donde muchos han desvalorizado lo real y puro de la obra evangelizadora, tiempos en que ya no hay muchos ejemplos a seguir, pero ante todo Dios quiere gente con fuerza, con vitalidad y con fervor para llevarle al mundo una palabra de ánimo y de esperanza, gente que esté dispuesta a sostener las sogas y gente que esté dispuesta a bajar por ellas y llegar a lugares en donde muchos nunca han llegado.

Una palabra que inspiró la vida de Carey fueron los textos de Hebreos 13:13-14, palabras que lo llevaron a tomar la soga con valor y decidirse a llegar a donde nadie se había atrevido sabiendo que quien sostenía la soga era el mismo Señor que lo estaba llamando a predicar el evangelio.

Predico la Palabra de Dios desde los 15 años de edad, me convertí al Señor desde que tenía 12 años, siendo seguidor de los Testigos de Jehová vine a Cristo y desde que oí su Palabra verdadera predicada con Unción y autoridad, dejé la doctrina de los Testigos de Jehová y vine a ser un verdadero Testigo de Cristo, para la gloria de su nombre he predicado a lo largo y ancho de Costa Rica, he predicado fuera de mi país, llevando este mensaje de esperanza a muchas vidas, a niños, a jóvenes y adultos, sabiendo que quien sostiene la “soga” para llegar a tantas partes es mi Señor Jesucristo. La vida y obra de este gran Misionero Guillermo Carey me inspira y me hace reflexionar sobre lo mucho que debemos hacer por la obra misionera, el Señor le habló a Felipe y le dijo: “Acércate y júntate a ese carro” (Hechos 8:29), era solo una persona la que viajaba en ese carro pero fue suficiente el hecho de que Dios quería salvar el alma necesitada de ese etíope, Dios nos manda a acercarnos a ese y a muchos carros en donde son transportadas tantas vidas necesitadas de Dios y urgidas de alguien que les explique las Escrituras, es tiempo de dejar a un lado los prejuicios, la pereza, la indiferencia y el egoísmo, muchos de esos “carros” viajan alrededor del mundo sin rumbo, sin sentido y muchos terminan en el abismo sin que nadie se acerque a ellos, que triste  es ese panorama, pero te insto en el amor de Cristo a que te acerques a esas personas que claman para que alguien les anuncie las bondades del evangelio de Cristo.

La vida de un misionero es apasionante y solo el fuego del llamado de Dios hace que cualquiera se sostenga ante tantas adversidades y necesidades que se presentan, aunque muchos no te aplaudan ni te valoren hay alguien que siempre sostiene tu “soga” para que no desfallezca la obra de tus manos, oh Misionero, oh siervo de Dios, me uno en este Día Mundial de las Misiones a sostener tu “soga” para que llegues a donde yo no puedo ir tal vez, sostener esa soga con oración, con voluntad y firmeza para que el Nombre de Cristo sea glorificado. Dios necesita misioneros decididos y apasionados!!!!

Rev. Martin Montiel Hernández- Costa Rica

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